En la imagen se aprecia al Presidente del Paraguay, Manuel Abdo, portando un arma en la cintura. Una costumbre de este genocida |
El 3 de septiembre, la Gremial
de Abogados y Abogadas de Argentina (GAAA) emitió un comunicado denunciando el
asesinato de dos niñas en medio de una acción contrainsurgente dirigida desde
los más altos mandos del estado contra la guerrilla del Ejército del Pueblo Paraguayo
(EPP), una organización de corte marxista-leninista que lleva a cabo la lucha
armada desde hace varios años.
El viejo estado reaccionario trató
de presentar la matanza ocurrida un día antes como un enfrentamiento armado entre
la Fuerza de Tarea Conjunta (ejército y policía nacional) y el grupo
insurgente, vistiendo los cuerpos de las menores con uniformes verde olivo y
cubriéndolos de tierra por “peligro de contaminación de covid”. Ahí
mismo se montó un escenario mediático para que el genocida Mario Abdo Benítez,
presidente del Paraguay, llegase a tomarse fotos con una pistola en la cintura,
haciendo alarde de su barbarie, pretendiendo infundir temor hacia el pueblo en
lucha.
Las niñas asesinadas respondían
a los nombres de María del Carmen Villalba y Liliana Villalba, ambas tenían once
años de edad y vivían en Argentina con su familia extensa, pero se encontraban de
visita en Paraguay festejando un cumpleaños. Efectivamente, sus padres son milicianos
del EPP, su tía es la camarada Carmen Villalba, quien se encuentra presa en las
mazmorras del régimen y a quién justamente hace diez años el ejército le
asesinó a su hijo cuando contaba con solo trece años de edad.
Las menores debieron huir a edad muy temprana hacia Argentina, escapando de la persecución en su contra por ser hijas de guerrilleros activos. Refugiándose con familiares en el vecino país lograron obtener la nacionalidad argentina, y ello ha generado también un conflicto diplomático con ese país, el cual ha exigido deslindar responsabilidades y aclarar la situación.
En torno a ello, está instruida
la comparecencia del sátrapa Abdo ante el Congreso del Paraguay para este día miércoles,
aunque la sesión será a puerta cerrada por seguridad nacional, ya que el
gobierno nacional asegura que hay “secretos de estado que no pueden divulgarse”.
En medio del conflicto diplomático, el general Héctor Grau de la FTC
declaró que Argentina se había convertido en una “guardería de soldados del
EPP”, lo que tiende a agravar más las relaciones entre ambos países.
En los hechos, este tipo de
operaciones de exterminio son comunes en el Paraguay; el uso del terrorismo de
estado direccionado principalmente hacia las familias de los activistas y
militantes revolucionarios, junto al genocidio y masacres en masa contra la
población, son parte de un plan contrainsurgente que busca minar la moral de
los opositores al régimen. Al respecto de esto, el Presidente Mao Tse Tung nos
enseña: “Provocar disturbios, fracasar, volver a provocar disturbios,
fracasar de nuevo, y así hasta la ruina: ésta es la lógica de los imperialistas
y de todos los reaccionarios del mundo frente a la causa del pueblo, y nunca
marcharán en contra de esta lógica. Esta es una ley marxista”.
La matanza de las dos menores a
quienes el viejo estado insiste en presentar como milicianas reclutadas por la
guerrilla demuestra que los falsos positivos son una práctica sistemática de los
regímenes reaccionarios alrededor del mundo, y estas se dan en el marco de la
más profunda descomposición del estado y la sociedad actual ante la agudización
de la crisis general que padecen. Esto ocurre de manera indistinta en los
países imperialistas y los países oprimidos.
Es necesario condenar la guerra
contra el pueblo y el genocidio que se lleva a cabo en el Paraguay, levantar la
voz exigiendo justicia para las víctimas del terrorismo de estado y mostrar solidaridad
de clase con nuestras hermanas y hermanos que han decidido luchar hasta el fin
contra el viejo estado reaccionario que les oprime y explota.
¡Solidaridad con las familias de las niñas María del Carmen y Liliana!
¡Solidaridad con el pueblo en lucha en Paraguay!
¡Abajo el gobierno reaccionario y genocida!
¡Viva el internacionalismo proletario!
Si usted desea más información, visite el sitio de la GAAA