En Sudán el ejército busca aplastar la revolución.


Es muy importante hablar sobre lo que está sucediendo en Sudán.

Pocas personas lo saben en Occidente, los medios de comunicación tradicionales hablan muy poco, pero desde diciembre Sudán está experimentando una verdadera revolución que desde ayer, lunes 3 de junio, sufrió una represión extremadamente feroz por parte del ejército que decidió acabar con el movimiento matando a decenas de manifestantes.

El 19 de diciembre de 2018, el aumento en los precios del pan en Sudán provocó manifestaciones espontáneas en la ciudad norteña de Atbara. Muy rápidamente, las manifestaciones se extendieron a todo el territorio sudanés y fueron reprimidas violentamente por el ejército, bajo las órdenes de Omar Al Bashir, presidente del país desde 1989. La represión hace que decenas de muertos y el movimiento evolucione hasta exigir la caída del régimen que, bajo la presión del imperialismo occidental, había aplicado las medidas de austeridad favorables a las potencias imperialistas occidentales que deseaba el Fondo Monetario Internacional. Después de varias semanas de protestas y huelgas, Omar Al Bashir despidió a su gabinete y proclamó el estado de emergencia el 23 de febrero de 2019. Las protestas continuaron y el 11 de abril de 2019, el ejército derrocó al Presidente, lo detuvo y retuvo el poder. Desde entonces, los manifestantes acamparon frente al cuartel general del ejército y continúan exigiendo una transición de poder a los civiles.

El ejército, que había prometido no masacrar a los manifestantes, decidió ayer reprimir violentamente el movimiento con la esperanza de ponerle fin. Los campamentos de los manifestantes fueron evacuados en todo el país, el fuego real del ejército mató a 35 personas. En respuesta, las fuerzas revolucionarias rompieron las conversaciones con el ejército. La Asociación de Profesiones (Sindicatos) de Sudán y el Partido Comunista de Sudán, en la vanguardia de las protestas, piden el levantamiento del pueblo, la huelga general y la desobediencia civil. Según la información encontrada ayer en Twitter, varios barrios en las principales ciudades del país ya se habían rebelado en respuesta a la brutal represión.

Hoy en día, es muy difícil obtener información porque la junta militar gobernante cortó Internet en todo el país, impidiendo que los sudaneses tuvieran información y la comunicaran.

Esta revolución sudanesa que comenzó hace casi seis meses es uno de los aspectos más destacados de finales de 2018 y comienzos de 2019. Las masas sudanesas, heroicas, se han atrevido a enfrentar a su presidente, un vasallo del imperialismo, frente al sistema que los mantiene en la pobreza y permite a las grandes potencias occidentales, pero también a China, saquear la riqueza del país. A pesar de la brutal represión, las perspectivas positivas de la Revolución sí existen, ya que la determinación del pueblo sudanés es fuerte, ¡tan fuerte como la determinación del Partido Comunista Sudanés y la asociación de profesiones sudanesa!

Si los grandes medios hablan muy poco de esta revuelta, entonces debemos hablar de ello, para popularizar la lucha del pueblo sudanés, para mostrar nuestro apoyo, para advertir también a los gobiernos occidentales que nos opondremos a cualquier intervención militar imperialista en el país. .

¡Viva la revolución sudanesa!
¡Abajo la dictadura militar!
¡Abajo el imperialismo!