¡2 de Octubre no se olvida!


 ¡La rebelión se justifica!

50 años se cumplieron de la masacre de Tlatelolco por parte del Ejército Mexicano, a través de su estado mayor, el Batallón Olimpia y la Dirección Federal de Seguridad (Policía Política del Régimen).

El entonces presidente del país, Gustavo Díaz Ordaz (PRI), veía conspiraciones de la Embajada de la URSS (Unión Soviética) y de la Embajada de la RPCH (China Comunista) para subvertir el orden establecido, las instituciones y el mismo capitalismo burocrático. Además de ser sede de los juegos Olímpicos, tenía que mostrar ante el mundo estabilidad en un México, que paralelamente se inflamaba en el campo y la ciudad, con luchas y huelgas que demostraban la precariedad de la vida de las masas populares.

Del otro lado del mundo se erguía desde Francia un mayo rojo y vigoroso, en las universidades públicas, que después paso a las calles y factorías.

Los grandes dazibaos sobresalían en París lo mismo que en la China Popular. Estas imágenes y sus gráficas darían la vuelta al mundo, dotándoles de un significado especial en México, en medio del creciente movimiento estudiantil, despertando la mente de miles de jóvenes, alentándolas al cambio radical y profundo de la sociedad, el cual se planteaba como totalmente necesario. Las banderas de una revolución que rompiera los paradigmas de una vieja sociedad crecían y florecían en las aulas y escuelas de todo el país.

El 2 de octubre de 1968, fue la culminación de una serie de luchas ahogadas en sangre por parte de la bota militar. Los responsables (militares y altos funcionarios de la Secretaría de Gobernación y la propia Presidencia de la República) –muchos de ellos hoy en retiro- se hincharon de orgullo en la más vergonzante impunidad tras haber liquidado al movimiento estudiantil, protegidos por el mismo viejo estado del cual forman parte, para no pisar las cárceles y mazmorras, que ellos mismos atiborraron con cientos de jóvenes y luchadores del pueblo.

Como Karl Marx afirma: la historia se repite dos veces, unas como comedia y otras como tragedia, el pensamiento crítico y materialista era muy popular en 1968, la ascendente Revolución Cubana, la luminosa Gran Revolución Cultural Proletaria en China, las huelgas de médicos y ferrocarrileros, las tomas de tierras, etc. alimentaban la rebelión estudiantil.

Lo que empezó como una gresca juvenil contra un grupo de porros, se elevaría a una lucha social de enormes proporciones, que devino en la intervención sanguinolenta del viejo estado contra los estudiantes del Politécnico y la UNAM, y luego de un sin número de agravios, los jóvenes de más de setenta escuelas de todo el país, deciden conformar su Consejo Nacional de Huelga para enfrentar al viejo régimen con un documento conocido como el pliego petitorio de los seis puntos, que esencialmente exigía libertad a los presos políticos, alto a la represión y castigo a los asesinos, como posicionamiento público de una generación que se propuso cambiar las bases de la actual sociedad y democratizarla, derrumbando el viejo estado para construir sobre sus ruinas uno nuevo.

Los paralelismos históricos de ayer y los de hoy son sorprendentes. Ahí siguen ante la injusticia, la corrupción, el patriarcado, la explotación y la opresión.

Los jóvenes del México de hoy, igual que hace 50 años, seguimos siendo mancillados y masacrados por el latifundio, el capitalismo burocrático y el imperialismo. La descomposición de esta sociedad, la débil línea que divide al estado con el crimen organizado, la ola de violencia absurda y bestial que atraviesa a todo el país, nos persigue y nos pretende acorralar, atemorizar, desorganizar, deslegitimar.

Luego de la masacre del 2 de Octubre de 1968. Luego de la masacre del 10 de Junio de 1971. Luego de la heroica huelga de la UNAM en 1999 (que también fue reprimida y asaltada por la policía militarizada llamada entonces “policía federal preventiva”). Luego de la huelga universitaria de la UABJO durante la rebelión popular de 2006 en medio del levantamiento de masas de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (huelga que intentó ser rota por medio de la misma táctica que el viejo estado utilizó en la UNAM, topándose con la más firme resistencia estudiantil-popular). Luego de la terrible Noche de Iguala, Guerrero, el 26 de Septiembre de 2014 y que dejó varios estudiantes normalistas heridos, asesinados y 43 desaparecidos en manos del ejército mexicano y las policías municipales de Iguala y Cocula. Luego de la huelga del Instituto Politécnico Nacional en 2014 en contra de la Reforma Educativa del régimen y la reforma al plan de estudio del IPN. Luego de la artera agresión cometida el pasado 5 de Septiembre contra la movilización estudiantil de los CCH´s de la UNAM en rectoría a cargo de grupos porriles y autoridades universitarias y que devino en ejemplar  paro general en la UNAM y que durante al menos cuatro días mantuvo el cierre total de preparatorias, CCH´s, facultades y escuelas adscritas demandando la salida de todo clase de grupos de porros, la historia del movimiento estudiantil y popular en nuestro país nos confirma que no debemos olvidar ni perdonar, mucho menos renunciar a la verdad y la justicia.

Las y los jóvenes estudiantes debemos reorganizarnos desde una perspectiva de lucha clasista y democrática. Debemos demandar el alto al terrorismo de estado y la guerra contra el pueblo. Debemos luchar en defensa de la educación gratuita, laica, científica, crítica y popular. Debemos pugnar por democratizar nuestras escuelas, liberarlas del porrismo criminal y sus llamadas “líneas” que se han adueñado de institutos y facultades. Debemos, finalmente, poner nuestros conocimientos al servicio del pueblo, ¡Servir al pueblo de todo corazón!
¡Eso es retomar las enseñanzas históricas del movimiento estudiantil!

Por ello, desde este espacio de articulación juvenil-estudiantil en Oaxaca decimos que la energía imparable de la juventud democrática y combatiente sale de nuevo a las calles, para gritar fuerte en ¡AQUÍ ESTAMOS, 2 DE OCTUBRE NO SE OLVIDA, ES DE LUCHA COMBATIVA!

A 50 AÑOS DEL 2 DE OCTUBRE DE 1968 ¡NI PERDÓN NI OLVIDO!

¡LA REBELIÓN SE JUSTIFICA!

Firmamos:

CASA UNIVERSITARIA INDÍGENA (UABJO), COLECTIVO ANTIFASCISTA PREPARATORIA #1, COLECTIVO CALAVERA (FACULTAD DE BELLAS ARTES), COLECTIVO DE LUCHA NORMALISTA,
 BRIGADAS JUVENILES DEL PUEBLO (BJP)